Concurso

Carta 1.-

Participante: Natalia Soto Albanecich

Yo entré a estudiar en la Escuela Josefina Gana de Johnson N° 5 "Las Nieves", de P. Alto. Ahí realicé toda mi enseñanza básica, fui una excelente alumna y muy destacada.
Hasta el día de hoy recuerdo a mis maestras con mucho cariño, es difícil escoger a sólo una ya que todas aportaron con su granito de arena.

La profesora que influyó en mi se llama Marcela Burattini Busto, porque guió mis primeros paso de enseñanza cuando yo tan sólo tenía 6 años. Me hizo clases de música y descubrió mis habilidades en el canto y la música, que es lo que me apasionaba, participaba en cada actividad que se realizaba en la escuela, como una de ella cantar en las misas que había, ya que nuestra escuela era católica.

La actividad que recuerdo con cariño fue cantar en la misa de Peregrinación del Cerro San Cristóbal en el Mes de la Virgen. Además, influyó en los valores que nos inculcaba cada día.
Recuerdo mucho una frase "QUERES ES PODER", ella me levantaba el ánimo con esa frase en los momentos de frustración cuando las cosas no me salían como yo quería. Fue una excelente profesora, mas que una profe fue una madre en la sala de clases

Ahora yo tengo 21 años y agradezco todo lo que hizo esta querida maestra por mí.

Soy una mujer llena de valores agradecida de la vida, una persona muy católica una excelente hija, profesionalmente me ha ido muy bien en la vida, tengo unos padres excelentes que están conmigo en cada momento que los necesito.

Hasta el día de hoy la recuerdo con mucho cariño, además de los momentos lindos que pasé en mi escuela, debo decir que con el paso de los años sigo en contacto hasta el día de hoy.

Es tanto el cariño y el aprecio que le tengo que nunca se me olvido su fecha de cumpleaños que es el 11 de Noviembre y la llamamos para saludarla cada año que pasa.

Como dice el titulo, ELLA ES UNA MAESTRA CON CARIÑO... QUE NUNCA LA PODRE OLVIDAR. Espero que les guste, yo lo disfruté mucho escribiendo, llegué a emocionarme porque fue volver atrás y recordar los momentos más felices que pasé en esa escuela junto con mi querida profesora.

Carta Nº 2

Participante: Alfonso Rodríguez Barraza

Hola, soy Alfonso y centinela del padre Hurtado en su santuario, quiero comentar que desde el año pasado a través de facebook hice un grupo llamado "la canción favorita de la misa " y resultó ser la ganadora, hace poco la canción que ha movido corazones en muchas generaciones y para mí también es la que más me gusta porque me identifica de igual manera la letra, sobre todo esa parte que dice “me has mirado a los ojos, sonriendo has dicho mi nombre”, cómo nos va llamando Jesús a través de nuestra historia de vida.

Ahora este grupo se llama "pescador de hombres", es esta la canción que más me gusta, espero que la puedan escuchar en algún minuto es hermosa que Dios los bendiga. Chau.

Carta Nº 3

Participante: Felipe Fuentes M.

Es bien difícil remitirse a sólo un profesor que me haya marcado, porque en mi caso hay varios y todos de una manera distinta. Pero si me tengo que centrar en uno en particular, ese es el Sr. Juan Carlos Costa, mi profesor de matemáticas en el 1º M del Liceo Lastarria. Él significó un cambio de mentalidad, primero que todo, muy grande al pasar de la ed. básica a la ed. media, ya que ya no nos trataba como niños, sino como jóvenes. En un segundo lugar, la forma de hacer las clases de matemáticas, a pesar que mi curso era en su mayoría humanista, era muy motivante. Lo hacía con tanta energía, entrega y preocupación por nosotros, que se notaba su vocación de profesor. Yo siempre he sido bueno para las matemáticas, y al parecer él se dio cuenta muy luego de eso porque siempre me instaba a que hiciera más ejercicios (así como a otros compañeros que también les iba bien), me recomendaba libros a veces, y cuando bajaba un poco las notas se notaba preocupado por eso y hasta me retaba. Ja Ja.

Otra cosa importante, que lo destaco mucho, y es en el fondo la razón porque hablo de él, es que a mediados de año, más o menos, al ver las notas de curso, ideó una especie de grupos de reforzamientos, en los cuales, los que tenían mejores notas les enseñaban, reforzaban o ayudaban a estudiar, a los que no les iba muy bien. Esa fue la primera vez que le hice "clases" a alguien, enseñando lo que sabía a quienes no. Ciertamente, nos motivaba con puntos extras o cosas así si los alumnos de los grupos subían sus notas o por lo menos no las bajaran. Eso me marcó mucho, porque me hizo descubrir una vocación que al parecer estaba oculta, y claro, mezclándola con el área que me gusta, las matemáticas. Yo ahora estoy en quinto año de "Lic. en Ciencias Exactas - Pedagogía en Matemáticas y Física" en la Universidad de Chile, para ser profesor de esos ramos en Ed. Media, y siento que es mi vocación al 100% y estoy muy feliz de haber escogido ese camino. Si no hubiese sido por él, quizás hubiera escogido alguna Ingeniería o algo relacionado, pero seguramente el bichito del servicio al prójimo, como es el enseñar al que no sabe, habría aflorado tarde o temprano.

Posteriormente, tuve otros profesores que me marcaron en el aumento del interés por las ciencias, así como en el servicio pastoral y la fe en Dios, pero fue él quien definió las sendas de mi futuro. Hoy doy gracias al Señor por haberme dado esas señales claras sobre mi vocación, porque con toda seguridad mi labor de educador la haré de corazón.
Gracias.

Felipe Fuentes M.
Licenciado en Ciencias Exactas
Fac. de Ciencias - Universidad de Chile

Carta Nº 4

Participante: Andrés Larraín Barros

Muy señores míos:
Siempre leo la revista Encuentro y encuentro interesantes temas que me hacen meditar y pensar.
A la pregunta de ¿quién fue el profesor que más influyó en mí y por qué?, mi respuesta salió de inmediato. Me eduqué en San Ignacio Alonso Ovalle y mi director espiritual y profesor de Apologética fue el Padre Alberto Hurtado.

El nos hizo conocer a Dios en sus retiros, sus clases y sobre todo en las andanzas buscando gente para llevar al hogar de Cristo, en el cual hacía clases de catecismo los sábados en la tarde a los niños del hogar.

Fue un hombre extraordinario. Lo acompañaba en sus andanzas buscando mercaderías para el hogar. De ahí aprendí a amar a Dios y conocerlo y esto influyó fuertemente en mi vida, además de mi familia que me dio una formación espiritual muy fuerte que me ha servido a lo largo de los años.

Andrés Larraín Barros
Armando Jaramillo Nº1524 Dep. 1202
Vitacura – Santiago
Agradecido a Dios y a la Virgen

Carta Nº 5

Participante: Manuel Jaime Román Rachel

La profesora que más influyo en mi vida fue la profesora de castellano la señora Liliana Trevizan, porque cuando la tuve como profesora en la enseñanza media (1984-85) a través de sus enseñanzas logró despertar en mí ese sentir oculto, el romanticismo que yo tenía, las ganas por escribir poemas, versos y hasta lo que pensaba, de esa forma conquisté a mi esposa escribiendo versos con su nombre, y aun por ahí le escribo algunos y se los dejo cuando me voy a trabajar para que los encuentre y los lea y sepa lo mucho que la quiero. Lo bueno de esto que después de más de 20 años encontré a la profe en Facebook, con la novedad de que se encuentra viviendo en Francia, desde allí nos comunicamos de vez en cuando y vemos las fotos de cada cual , de mi familia y la suya.

Manuel Jaime
08 de febrero de 2010

Carta Nº 6

Participante: Mary-Ann Roberts de Paulsen

Hola a tod@s !!!

Me es difícil hablar de una sola profesora que me haya marcado en la vida escolar.
Nombraría a todas mis profesoras y profesores, pues, debo reconocer que tuve mucha suerte con todos ellos. Pero mínimo son seis mujeres que fueron mis maestras en diferentes etapas de enseñanza que las recuerdo con mucho cariño y gratitud.

En la enseñanza pre-escolar está Miss Mc Intosh (con mucha pena, no me puedo acordar de su nombre ) del Colegio Chileno-Británico de Villa Alemana en la V Región. Ella con sabiduría y mucho amor me hizo sentir importante y querida por el curso. Se esforzó y me convenció de que participará en la Revista de Gimnasia a fín de año.

Aún poseo la foto de aquella velada en que yo estoy participando tomada de su mano, vestida de mariposa y cantando una canción en inglés alusiva al personaje que todavía tarareo a mis hijos y nietos.

En la enseñanza básica fueron Juana Muñoz y Teresita Marchant del Colegio Las Teresianas de Las Condes que me acogieron, entendieron y me aceptaron mi carácter, mi personalidad y mi forma de ser donde siempre me hicieron sentir que así llegaría lejos, pues, transparentaba lealtad, sinceridad y vocación de servicio.

En la enseñanza media están Pilar García, Sonia Fuentes y Nelly Luengo del Liceo Nº 1 de Niñas de Santiago. Ellas me guiaron por la vida en mi etapa de adolescente, me sacaron trote, que se los agradezco hasta hoy, y me dieron todo su apoyo cuando salí elegida dentro de la directiva del Centro de Alumnas en un cargo que por primera vez se tenía que ejercer.

También recuerdo que con una de ellas tuve un problema de credibilidad donde no le guardo rencor. Más aún, su actitud me enseño que siempre era muy importante mantener una sola postura ya que mis argumentos me daban la razón. Y hasta hoy es así.
Pero por las vueltas de la vida me tocó hacerle clases a sus hijas y yo con ellas, mis alumnas, fui siempre muy cuidadosa de tratar de ser la profesora que por, sobretodo, las escuchaba y confiaba en su actuar y pensar.

Gracias a todas ellas y a las que, por espacio, no nombré, pues, debo reconocer que tuve mucha suerte con mis profesor@s.
Creo que me excedí en palabras, pero, los desafío a ustedes a resumirlo, si bien vale la pena publicarlo.

Estamos en contacto,
Mary-Ann Roberts de Paulsen
Fono fijo 2293196 y móviles
93277568 y 92253414

Carta Nº 7

Participante: Juan Luis Tapia Rivas

No necesito escarbar mucho en el baúl de los recuerdos para mencionar que el profesor que más influyó en mí fue Don Carlos Ibarra Tapia, Profesor de Historia del Liceo experimental Gabriela Mistral de la actual Comuna de Independencia, Región Metropolitana, fue nuestro formador de valores como: la responsabilidad, dignidad, amor al estudio y al trabajo, entre otras tantas, en lo particular influyo tanto en mí, que mi formación profesional la decidí por la Historia.(soy Licenciado en Historia), después de 31 años de egreso de la enseñanza media, todavía mantenemos contacto un grupo de ex-compañeros del 4to.B con el Profe Carlos, que a esta altura de la vida (tengo 49 años) lo consideramos un verdadero amigo. Cuando cumplimos 30 años de egreso celebramos una cena de Gala en el gimnasio del Liceo, pudimos reunir alrededor de 27 ex compañeros con sus familias y padres y por su puesto nuestro profe Carlitos Ibarra, uno de los acontecimientos más emocionantes de mi vida, Gracias Carlitos por todas las cosas que nos traspasaste visibles e invisibles, tu siempre querido alumno y amigo...

Juan Luis Tapia Rivas.
Amigo de los Siervos de Maria.
Catequista Prematrimonial, Ministro Extraordinario Comunión
Parroquia Santa Teresita del Niño de Jesus.
Matrimonio de Equipo Fundación Encuentro Conyugal Chile.

Carta Nº 8

Participante: Álvaro Hernán Aguilera Lepe

Hola hermanos de periódico Encuentro: me llamo Álvaro Aguilera.
El profesor que más influyó en mi vida realmente fueron 3, las profesoras Flor Lara, la profesora Adriana Taiba y el profesor Osvaldo Olivares. Ellos son profesores de religión y doy gracias a Dios por tener el privilegio de ser uno de sus alumnos, al verlos con la pasión, amor y entrega con la que enseñan la palabra del señor en las aulas del Liceo Alberto Hurtado, pude decidir lo que quería estudiar en la Educación superior... así es gracias, a ellos yo también he optado por seguir sus ejemplos en la carrera de pedagogía en religión en Enseñanza Media. Un abrazo en cristo
Álvaro
"contemplar a Cristo con los ojos de María"

Carta Nº 9

Participante: Maria Soledad Salas

Alicia Salinas, mi tierna Maestra. La señorita Alicia llegó a mi vida cuando yo tenía ocho años. Fue la maestra que me acompañó con su dedicación en mi casa, durante mucho tiempo, ya que por sufrir tuberculosis, yo siempre estaba atrasada en las materias escolares y ella me instaba a estudiar y me animaba a salir adelante.

Fue mi amiga, me llevaba al zoológico y al Museo de Historia Natural, donde me sentí maravillada por sus explicaciones. En un verano, a orillas del río – para que terminara mi recuperación – abrió para mí, el mundo mágico de Dios: ante cada bichito que descubríamos, cada flor que veíamos, mencionaba el nombre del Señor como gesto en todo.

A los 14 años, la elegí como madrina de Confirmación.

Hoy en día, cuando enseño Catequesis a las niñas y a los niños en mi Parroquia San Pedro de Las Condes, recuerdo su dulzura, calidez y ejemplo.

La señorita Alicia me enseñó a comprender el significado de los contratiempos y a vivir feliz de la mano de Dios.

Febrero 13, 2010

Carta Nº 10

Participante: Jeannette Arriagada

Mi nombre es Jeannette Arriagada soy profesora de matemática de la comuna de Maipú.

El profesor de básica que más influyó en mi vida y de mi hermano Rodolfo fue Voltaire Hernández profesor de castellano y folclorista en el colegio fiscal de Quepe en la Novena Región. A pesar de ser muy estricto era muy humano y cercano a sus alumnos.

Participábamos en muchas actividades junto a él y su esposa la profesora Marta Córdova en nuestra estadía por la básica. Una vez estando en 8° básico para el día del profesor nos robamos la campana del colegio de madrugada para que nadie se diera cuenta, estando muy bien organizado con la ayuda de él, solo nuestro curso fue el que organizó la actividad culminando con un hermoso acto realizado solo por alumnos, yo dirigí la canción nacional y recité Piececitos de Niños de Gabriela Mistral sin respirar de inicio a fin, y en medio del acto apareció la campana con sus entrañable melodía siendo toda una sorpresa y comentario de alumnos y profesores.

A muchos nos ayudó a obtener la beca indígena, además fue el apoderado de mi hermano en enseñanza media en el Liceo de Temuco ya que vivíamos en el campo y a mi madre no podía asistir a las reuniones, también lo fue a matricular a la Universidad Técnica del estado en Temuco porque mi hermano estaba trabajando de auxiliar de buses.
Participaba con su familia en el coro de la iglesia del pueblo, tenia un conjunto folclórico con su esposa e hijos, además tenía un programa que se llamaba “gente menuda” en una emisora de Temuco con canciones infantiles y cuentos que todavía con mis 54 años los recuerdo con emoción.

Estas vacaciones fui a visitar a mi hermano donde recordamos nuestra niñez y supe que nuestro querido maestro había partido a un descanso eterno donde seguro estará tocando su piano, su guitarra o su acordeón junto a los ángeles celestiales, estará enseñando y siendo cómplice de alguna travesura como aquella de la campana.

Hasta siempre querido profesor, pues trato de ser maestra más allá del aula.
Jeannette Arriagada

Carta Nº 11

Participante: Karina Retamal

Hola…
Recuerdo a mi maestro con cariño, mi profesor “el gato”, el era mi profesor de ciencias naturales en 2 año medio en el colegio José Miguel Carrera 25, en Zapadores con Diego Silva, para mi fue un profesor inolvidable, un hombre con una carcasa muy dura pero al conocerlo era una persona muy buena, él nos quería mucho como curso y siempre estaba al pendiente nuestro. A pesar de ser el profesor y de tener responsabilidades siempre fue nuestro amigo, cada vez que él entraba a la sala mis compañeros lo saludaban con un maullido y el solo entregaba una sonrisa.

Hoy tengo 51 años y no se si el estará vivo, pero para mí, su recuerdo siempre estará presente en mis anécdotas escolares, las que traspaso al contárselas a mis hijas, ya que el fue el mejor profesor que tuve.

Erika de las Mercedes Inda Suazo
08- 70 74 444. Puente Alto

Carta Nº 12

Participante: Nieves Maturana Godoy

Egresé en 1946 del liceo N° 7 de niñas, donde cursé mis últimos cuatro años de humanidades, de los cuales tengo los mejores recuerdos, así como de su equipo de profesoras que siempre nos estimularon con su ejemplo y su afectuosa dedicación de maestras. Recuerdo especialmente a mi profesora de Castellano y Literatura en 4° humanidades (2° medio) la Srta. Bethsabé Alarcón, quien disfrutaba intensamente enseñándonos las hazañas del Cid Campeador, y que siempre nos estimulaba a escribir tareas para la clase de Composición. Fue así que compuse mi primera poesía, que aún conservo y que transcribo aquí para ustedes.

“El Ciprés”

“Frío, majestuoso, serio, te alzas altivo ciprés, cubriendo con tu ramaje las tumbas del cementerio. Tu sola presencia impone un silencioso respeto por las desoladas tumbas y los solitarios muertos. Árbol santo, Dios te puso donde reposan los muertos para servir de eslabón entre el vil mundo y el cielo. ¿No es tu misión bien honrosa? ¿No es tu misión celestial? Sin embargo eres humilde, pues la frente alzar no osas al cielo donde Él está.
Buen ciprés, yo te comprendo: sientes vergüenza y piedad por las faltas de los hombres que al mundo están encendiendo y no quieres que estos hechos turben la paz en el cielo”

Pero la Srta. Bethsabé no se convenció que la hubiera escrito sola, sin ayuda y me pidió otra poesía de tarea para la casa y esa vez escribí una comedia en verso tomada de un cuento inglés.

Después de eso, a lo largo de mi vida, he escrito muchos poemas, cartas, cuentos que aún conservo y hoy, profesora jubilada, disfruto con su lectura y agradezco a esa maestra que supo captar mis inquietudes literarias y me motivó a desarrollarlas.