Mayo 2009 / NÚMERO 27

volver

La vida brinda oportunidades

Verónica Canut de Bon es diseñadora de vestuario, profesión que dejó de ejercer para asumir como ejecutiva de ventas de El Mercurio de Valparaíso, trabajo que mantuvo por 9 años, hasta que “por necesidades de la empresa” debió dejarlo. Fue entonces que decidió buscar nuevos rumbos.

¿En qué trabajaba y por qué dejó ese empleo?

Trabajé durante 9 años como ejecutiva de ventas en El Mercurio de Valparaíso, empresa a la que le tengo mucho cariño y agradecimiento. Por necesidades de la empresa dejé de trabajar ahí, pero desde hacia un tiempo ya sentía que necesitaba un cambio. Por lo que sentí que todo se dio bastante bien. Creo que Dios sabe cuando los tiempos están cumplidos en cada uno de sus sentidos y yo sentía que había cumplido ya mi ciclo dentro de la empresa. Por lo que, en mi caso, creo que todo ocurrió en el momento justo que debía suceder. Y estoy muy agradecida por ello.

¿Cómo hizo frente a esa cesantía?

Yo he dibujado toda mi vida, soy autodidacta en lo referente a mi arte. De profesión diseñadora de vestuario con título profesional, pero por circunstancias de la vida terminé trabajando en ventas. Jamás me imaginé que me dedicaría en algún momento al arte de forma profesional. Las cosas se fueron dando de a poco. Y cuando ya estuve sin trabajo decidí dedicarme profesionalmente y ciento por ciento a dibujar y realizar contactos para exponer mi arte y hacerme conocida. Y no me puedo quejar, ya que mis obras han sido muy halagadas.

Es muy importante confiar en Dios y en el don que Él nos ha dado y que muchas veces no valoramos. Desarrollarlo y ser el mejor en la habilidad que tienes. Eso es primordial. Es una buena forma de agradecer lo que te han dado como parte de tu ser.

¿Es cierto que toda crisis es una oportunidad?

No sé si las crisis en sí sean una oportunidad, más bien creo que la vida nos brinda oportunidades, no importa el momento. Lo que ocurre es que cuando se vive hacia adelante no entendemos el por qué de las cosas que nos ocurren, pero, al mirar hacia atrás en el tiempo ahí recién entendemos el por qué de las cosas. Sólo debemos confiar que todo ocurre por algo y que siempre es por algo mejor, jamás será por algo peor.

El ser y pensar positivo ayuda bastante. La alegría de vivir y sentirte un ser feliz y agradecido  es la base para que lo nuevo que realices lo partas con muchas ganas y buenas energías.